Con el auge de los dispositivos móviles y del Internet de las Cosas, conectarse a Internet a través de una red inalámbrica WiFi se ha convertido en la forma más habitual de hacerlo.
Usar una conexión WiFi es barato y cómodo, ya que no hacen falta cables y permite conectar a redes inálambricas públicas, pero conlleva una merma en seguridad y privacidad.
El problema es que estas redes públicas pueden ser usadas de forma maliciosa para delinquir. Existen múltiples formas de hacerlo y una de ellas es la creación de redes Wi-Fi gemelas, de las que vamos a hablar.
Qué son las redes WiFi gemelas
La creación de redes inalámbricas gemelas es una práctica muy utilizada por hackers o ciberdelincuentes con el objetivo de capturar todo el tráfico que pasa por ellas y hacerse con credenciales o información confidencial.
Tal como se deduce se su nombre, una red Wi-Fi gemela es un calco exacto de otra legítima y segura.
Para crearlas los ciberdelincuentes cuentan con software y hardware con el que montan la red idéntica, configurada con el mismo nombre y parámetros de conexión y esperan a que la víctima caiga en la trampa y se conecte.
¿Como afectan a la seguridad las redes inalámbricas gemelas?
Todos los lugares en los que se suelen desplegar redes WiFi gemelas tienen algo en común, son sitios frecuentados habitualmente por mucha gente. El hacker permitirá el acceso a la red WiFi gemela de forma indiscriminada, ya que cuantos más usuarios se conecten, más probabilidades de robar algún dato de valor.
El mero hecho de conectar y navegar a través de una red WiFi gemela o replicada no tiene por qué suponer un riesgo para la seguridad.
El problema viene si introduces datos bancarios o credenciales de acceso a algún servicio ya que estos son el objetivo del pirata informático.
¿Cómo detectar redes WiFi falsas?
El primer indicativo de una red WiFi falsa es que haya dos redes con nombres iguales o muy parecidos. También es muy habitual añadir al nombre de la red WiFi la palabra “gratis”.
Otro aspecto importante es fijarte en las redirecciones. Es lo que ocurriría si intentas acceder a tu cuenta bancaria, de correo o redes sociales, pero la página que aparece es otra.
Puedes detectar este tipo de webs simplemente con mirar si carga a través de HTTPS o no. Si ves que sólo puedes navegar por webs con tráfico HTTP, detñén tu actividad de forma inmediata.
No permitir el tráfico HTTPS es uno de los métodos usados por las redes WiFi falsas.
Además, lo normal es que este tipo de red esté abierta o que permita el acceso introduciendo cualquier contraseña. Esto lo hacen así para que la víctima ponga la misma clave de la red legítima y pueda entrar sin problemas.
Si pruebas con una clave cualquiera y tienes acceso, seguramente estés ante una red modificada de forma maliciosa.
¿Se pueden usar redes inalámbricas públicas de forma segura?
Por supuesto, pero es importante estar siempre alerta.
Cuando vayas a conectarte a una red pública toma ciertas precauciones como no acceder a cuentas sensibles o enviar información personal. También, siempre que sea posible, puedes utilizar un servicio VPN. Así tu conexión irá cifrada.
NUNCA uses aplicaciones bancarias o en las que tengas que introducir tus credenciales, como usuario y contraseña, mientras estés conectado a una red pública.
Navega siempre sobre el protocolo seguro HTTPS y desconfía de redes abiertas en las que no haya que introducir contraseña.
Presta especial atención en los aeropuertos, ya que un estudio ha demostrado que es el lugar preferido por los hackers para desplegar sus redes WiFi falsas.
En definitiva, las redes WiFi gemelas no son más que redes inalámbricas configuradas exactamente igual que la original pero que pueden poner en riesgo tu seguridad y privacidad.
Como siempre, el sentido común es tu arma más valiosa para mantener tus datos y tu privacidad alejados de miradas maliciosas.